¿En qué consiste el diagnóstico prenatal?

Hoy te explicaremos la información esencial que necesitas saber sobre este conjunto de pruebas indispensables para salvaguardar tanto la salud del feto como la de su madre.

Revisado y aprobado por la pediatra Marcela Alejandra Caffulli.

Escrito por Marcela Alejandra Caffulli

Última actualización: 12 enero, 2023

Todas las mujeres al momento de quedar embarazadas desean brindarles a sus hijos aquellos cuidados médicos que estén a su alcance para asegurar su salud y sano desarrollo. Si te encuentras en la dulce espera, sigue leyendo y descubre en qué consiste el diagnóstico prenatal y la gran importancia que tiene su realización durante la gestación.

Para dar seguimiento a la adecuada formación y desarrollo del feto se realizan un conjunto de pruebas durante diferentes etapas del embarazo que pueden salvar la vida de los bebés y de sus madres. A estos exámenes se les conoce como diagnóstico prenatal. No obstante, a pesar de que algunas pruebas son iguales para todas las mujeres, otras deben realizarse a partir del estado tanto de la mamá como del feto.

¿En qué consiste el diagnóstico prenatal durante el embarazo?

El principal objetivo del diagnóstico prenatal es llevar un monitoreo de la correcta evolución y desarrollo del feto. Esto con el objetivo de detectar y prevenir posibles enfermedades o deformaciones frecuentes durante algunas etapas del embarazo. Ya que está comprobado que la mayoría de los defectos congénitos ocurren durante los primeros tres meses de la gestación.

Debido a lo anterior, es muy recomendado que las madres gestantes cuenten con un seguro de salud familiar para que puedan realizarse todas las pruebas recomendadas por el ginecólogo. Y, de esta manera, poder saber junto a su pareja cuál será el estado de salud de su pequeño antes de su esperado nacimiento.

Estos son algunos de los exámenes comunes durante el diagnóstico prenatal.

1. Ecografías. Son probablemente la prueba prenatal no invasiva más conocida por todas las futuras madres y se realizan a lo largo de todo el embarazo. A partir del segundo mes ayudan a diagnosticar posibles malformaciones y desde el tercero permiten detectar marcadores de cromosomopatías.
2. Pruebas de ADN fetal en la sangre materna. Este es uno de los exámenes más frecuentes y se realiza a partir de la semana 10 del embarazo. Los resultados permiten saber si el feto cuenta con alguna anomalía cromosómica; por ejemplo, el síndrome de Down o el síndrome de Edwards.
3. Amniocentesis. En esta prueba se realiza un análisis del líquido amniótico que rodea al bebé en desarrollo durante las semanas 15 y 20 de la gestación. Con el fin de diagnosticar trastornos genéticos, defectos congénitos y otros problemas de salud. Tales como la fibrosis quística o la enfermedad de Tay-Sachs.

¿Cuál es la incidencia de los defectos congénitos?

Las pruebas de diagnóstico prenatal son indispensables durante toda la gestación, ya que permiten identificar a tiempo la gran mayoría de los defectos congénitos que pueden afectar a los fetos. Y es que un diagnóstico a tiempo antes del nacimiento facilita los cuidados pre y posnatales. Además, en casos extremos, les posibilita a los padres tomar la decisión de continuar o interrumpir el embarazo.  Ya sea por el bien de la madre o por las futuras complicaciones en la salud de su hijo.

Se estima que los defectos congénitos afectan al 5 % de los embarazos. En dichos casos, el bebé en desarrollo presenta una anomalía que, según su gravedad, puede dar lugar a la muerte intrauterina o que al momento del nacimiento se presenten anomalías físicas o mentales.

¿Cuál es la preparación para las pruebas de diagnóstico prenatal?

Esto depende mucho del examen que se vaya a realizar. En caso de tratarse de una prueba de imágenes como la ecografía, no existen recomendaciones previas y el procedimiento resulta indoloro. Ya que es una prueba pensada para no ocasionar molestias o efectos secundarios.

Sin embargo, en caso de realizarse una amniocentesis, sí son necesarias algunas instrucciones. Por ejemplo, realizar los análisis clínicos en ayunas y acudir con la vejiga llena (en caso de estar en una etapa temprana del embarazo). Puesto que esto favorece que el útero se mueva a una mejor posición durante la prueba. No obstante, en etapas tardías de la gestación se debe acudir con la vejiga vacía.

Durante la prueba, la mujer se acuesta boca arriba en una mesa de exploración. Luego, el profesional que la está atendiendo mueve sobre su abdomen un aparato conocido como transductor, que usa ondas sonoras para conocer la posición del feto y la placenta. Para, posteriormente, insertar una aguja en el abdomen y extraer la pequeña cantidad del líquido amniótico que será analizada. Es un procedimiento que no suele durar más de 15 minutos.

Realízate las pruebas de diagnóstico prenatal y cuida de la salud de tu bebé

Ahora que conoces la importancia que tiene el diagnóstico prenatal para velar por la salud de la madre y de su pequeño, no dudes en realizarte todas las pruebas que te recomiende tu médico de cabecera si te encuentras en la dulce espera. Recuerda que una valoración a tiempo puede salvar tu vida en caso de correr peligro y nos permite saber a ciencia cierta que el embarazo y el desarrollo fetal se encuentran en perfectas condiciones.