Dolor de espalda en niños y adolescentes: síntomas, causas y tratamiento
El dolor de espalda en niños y adolescentes es relativamente frecuente, así como su derivación a fisioterapia. Es común que en algún momento de la etapa de desarrollo, los menores sientan dolores momentáneos. Muchas veces, suelen desaparecer espontáneamente, pero otras necesitan un tratamiento profesional.
Ante la presencia de dolor de espalda en su hijo, la primera medida es realizar una consulta al médico para determinar la causa que lo provoca. Algunas veces, es necesario realizar estudios complementarios, como radiografías o resonancias magnéticas, para realizar un diagnóstico certero.
Síntomas del dolor de espalda en niños y adolescentes
El dolor es un síntoma en sí mismo y puede presentarse de diferentes formas. Por ejemplo, puede ser localizado en un determinado punto o generalizado en una zona de la espalda. Además, hay dolores permanentes y otros esporádicos. Incluso, a veces se perciben en reposo o en el inicio de determinado movimiento. También, se pueden presentar dolores agudos y crónicos.
El dolor de espalda es menos frecuente hasta los 10 años. Sin embargo, las estadísticas aumentan notablemente hacia los 14. De acuerdo con la causa, la localización del dolor será cervical, dorsal, lumbar o sacra. Además, en algunos casos, se presenta en más de una zona.
Actualmente, debido al aumento del uso de pantallas, es cada vez más frecuente la incidencia de dolor de cervical en adolescentes. Esto se debe a las malas posturas sostenidas por largos períodos durante el día.
Causas posibles del dolor de espalda
De todos los síntomas, el dolor es el más común. De hecho, suele ser el mayor motivo de consulta en general. Sin embargo, también se asocia con otros signos y síntomas que ayudan a determinar el diagnóstico específico. A continuación, te contamos algunas de las posibles causas del dolor de espalda en niños y adolescentes:
- Dolores asociados con la escolaridad: por ejemplo, por el uso de mochilas con carga de peso excesiva. Los materiales escolares cargados en la espalda no deben superar el 10 % del peso del niño. También, es causante de dolor la mala postura durante el tiempo que están sentados en el mobiliario escolar.
- Sedentarismo: la falta de actividad física como hábito genera menor movilidad general, así como mayor debilidad en los músculos que se encuentran en desarrollo.
- Traumatismos o lesiones deportivas: pueden producirse en la actividad deportiva o por caídas o golpes. No se recomiendan los entrenamientos muy exigentes en niños por el riesgo de lesión.
- Escoliosis: la alteración en la alineación de la columna vertebral desencadena un desequilibrio en la actividad de los músculos de la espalda. El dolor en alguna de las zonas de la columna es uno de los síntomas de la escoliosis.
- Enfermedad de Scheuermann: afecta la zona media o media alta de la espalda. De ese modo, provoca modificaciones en las vértebras y genera un aumento de la curva que aumenta progresivamente.
- Procesos infecciosos o tumorales: el dolor es uno de los síntomas que manifiesta condiciones orgánicas que afectan al niño.
- Hernia de disco: es muy poco frecuente en adolescentes y menos aún en niños.
Tratamiento de fisioterapia en niños y adolescentes
El procedimiento, en un principio, será indicado por el médico pediatra. En los casos más graves, existe la posibilidad de un tratamiento quirúrgico para corregir la causa. En la mayoría de los casos más leves, la fisioterapia infantil es una de las principales herramientas terapéuticas. Luego de la derivación médica, el fisioterapeuta realiza un examen físico completo para determinar el tratamiento pertinente para cada niño.
En niños y adolescentes con dolor de espalda que sea consecuencia de la escolaridad o el sedentarismo, la fisioterapia incluirá ejercicios de movilidad activa y elongaciones. Además, se enseñan a los padres o familiares ciertas pautas que ayudan a proteger una buena postura para las actividades de la vida diaria.
En casos de traumatismos, lesiones deportivas o escoliosis, los tratamientos de fisioterapia se diseñan al tener en cuenta varios factores. Entre ellos, la edad, la causa y el mecanismo de la lesión. Algunas veces, se complementa el tratamiento con vendajes u órtesis, como el corset en el caso de las escoliosis moderadas a graves.
Hábitos saludables, la mejor manera de prevenir
La mejor forma de prevenir el dolor de espalda en niños y adolescentes es a través de los hábitos saludables. Por ejemplo, a través de una buena calidad en la alimentación y realizar actividad física recreativa. Los deportes a temprana edad deben ser realizados sin sobre entrenarse y con todas las medidas de seguridad para evitar lesiones.
Otra medida preventiva es la enseñanza de la higiene postural. De esa forma, se evitan las posiciones sostenidas o las actividades que puedan generar o incrementar el dolor de espalda.
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