Beneficios de practicar natación durante el embarazo

Si deseas practicar deporte mientras estás embarazada, debes tener en cuenta que la natación comporta innumerables beneficios para las futuras mamás. Te los contamos a continuación.
Beneficios de practicar natación durante el embarazo

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 06 abril, 2018

Practicar natación durante el embarazo es especialmente adecuado para las futuras mamás. Si estás esperando la llegada del bebé, debes tener en cuenta que se trata de un ejercicio aeróbico que puedes realizar desde el tercer al noveno mes de embarazo.

A diferencia de otros deportes más pesados ​​y agotadores, la natación es un ejercicio ligero y propicio para ponerlo en práctica durante la gestación. Las futuras madres pueden nadar desde el primer trimestre del embarazo, obviamente después de los controles médicos que aseguren el estado de salud completo del niño y de la madre.

6 Beneficios de practicar natación durante el embarazo

A continuación, te ofrecemos 6 beneficios de practicar natación para las futuras mamás:

1.- Reduce el dolor de espalda

Se trata de un deporte que implica una reducción significativa del peso del niño en la columna vertebral de la madre. Durante las actividades acuáticas, ya sea nadar o hacer aquagym, el cuerpo no está sujeto a la gravedad y está sostenido por el agua.

Esto permite realizar movimientos sin soportar peso sobre la columna vertebral o las articulaciones. En este tipo de entrenamientos, las articulaciones no están sobrecargadas y esto es beneficioso especialmente en casos de sobrepeso y obesidad.

2.- Beneficios corporales

La natación, practicada con regularidad y moderación, es una actividad que permite quemar caloríasAdemás, ayuda muchísimo a promover la relajación del cuerpo y, al mismo tiempo, tonifica y adelgaza la silueta.

Nadar durante la gestación hace que sea más fácil eliminar los kilos de más que se cogen durante el embarazo y contribuye a mejorar el tono muscular.

Las futuras madres que practiquen natación durante el embarazo también se beneficiarán psicológicamente.

3.- Alivia el estrés y las contracturas

El masaje constante del agua permite a las futuras mamás aliviar el estrés y las contracturas musculares que acompañan el período de gestación.

Debes tener en cuenta que, durante el embarazo, la acumulación de líquidos, especialmente en las extremidades inferiores, favorece el estancamiento y el consiguiente hinchazón. Por ejemplo, se da en los tobillos.

En el agua, flotas y pesas una décima parte de lo que pesas en tierra. Este hecho produce un alivio en la presión de los miembros inferiores y superiores.

Asimismo, la natación es una actividad muy relajante que te permite estirar los brazos y las piernas y aliviar la tensión muscular.

“Sentirte gorda dura nueve meses, pero la alegría de convertirte en madre dura para siempre”
–Nikki Dalton–

4.- Te sentirás más ligera

La futura madre que elige ir a nadar en la piscina durante los nueve meses de embarazo ayuda a su cuerpo a sentirse mejor. Esto debe hacerse conscientemente y bajo el estricto control y consejo del médico.

Entre otras cosas, la natación ayuda a la futura madre a desinflarse, promueve la diuresis y produce que se sientan más ligeras. 

Nadar, por lo tanto, permite a las mamás embarazadas aliviar rápidamente todos estos trastornos generalizados y hace posible que alcancen un buen nivel de bienestar físico.

5.- Beneficios psicológicos

Las futuras madres que decidan practicar natación durante el embarazo también se beneficiarán psicológicamente; esta actividad permite aliviar el estrés y la tensión y desconectar de los problemas cotidianos. Por ende, ayuda a asegurar el bienestar físico y mental.

6.- El agua mitiga las hinchazones

Los pies y los tobillos tienden a hincharse cuando estás embarazada debido a la famosa retención de líquidos. Cuando se nada con las extremidades en inmersión, los líquidos se empujan nuevamente hacia los riñones. Posteriormente, así, son expulsados mediante la orina.

Asimismo, nadar también mejora la circulación sanguínea del cuerpo. Todas estas consecuencias permiten que los pies y tobillos eliminen la mayor parte de los fluidos.

Antes de practicar natación durante el embarazo, es esencial que consultes con tu médico.

Los estilos de natación más adecuados para las embarazadas

Ciertamente, el estilo de braza es el más adecuado para las mujeres embarazadas, ya que no requiere una rotación del torso y no implica esfuerzos considerables.

En el embarazo, la columna vertebral y la pelvis tienden a inclinarse hacia adelante. Por eso, brazear ayuda a fortalecer todos los músculos de la espalda y relajarse.

Otro método muy adecuado para las embarazadas es el estilo de espalda. Este no implica ningún riesgo para el bebé y ayuda a aliviar los dolores musculares que tienden a acumularse.

Para acabar, es importante subrayar que, antes de practicar natación durante el embarazo, es esencial que consultes con tu médico de atención primaria y a tu ginecólogo de confianza. De esta forma, se evita cualquier problema que surja a raíz de la práctica deportiva.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.