Siembra un futuro verde para tu hijo

Que nuestros hijos tengan un futuro verde en nuestro planeta depende de nosotros... Ellos seguirán nuestros pasos.
Siembra un futuro verde para tu hijo
María José Roldán

Revisado y aprobado por la psicopedagoga María José Roldán.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 21 mayo, 2020

Sembrar un futuro verde para tu hijo no solo va a garantizarle los árboles y las plantas del mañana. También le ayudará a ver la reforestación como un deber de cada uno de los seres humanos que habitamos este planeta. En Eres Mamá te mostramos cómo proceder, desde tu pedacito de tierra, para enseñarle esto al niño.

La importancia de sembrar un jardín: un futuro verde para tu hijo

Los jardines son un complemento importante de las viviendas. Ellos le dan un toque de savia a tanta obra constructiva. Se convierten en ese espacio armonioso que conjuga la naturaleza con la vida moderna y, a la vez, pasan a ser un elemento fundamental de la cotidianidad de las personas.

Primeramente, debes saber que las plantas ornamentales que se siembran en los jardines se aprecian por su aroma, color y belleza. Sus colores también refrescan la vista. Ofrecen bienestar emocional y hacen el entorno más agradable. Si están en interiores estos cultivos elevan la humedad dentro del local, lo que incide de forma positiva en la hidratación de la piel de los humanos. Tenerlas en casa reduce el estrés, aumenta la concentración y evita los estados de ánimo depresivos.

Enséñale a tus hijos por qué son necesarios los árboles

un futuro verde para tu hijo

Después, los árboles proveen de sombra y amparan del viento a los animales y otras especies florales que viven debajo de ellos. Un árbol en sí es un ecosistema. La biodiversidad que se desarrolla desde su copa, hasta sus raíces y el suelo que protege, es sorprendente.

Microorganismos, reptiles, insectos, aves, pequeños mamíferos, plantas epífitas, hongos, y otras especies del reino vegetal, en él, conviven resguardadas. Los árboles protegen al suelo de la erosión de las precipitaciones.

Además, su follaje atrapa la lluvia para que las gotas de agua se deslicen por hojas, ramas, tronco y no caigan directamente al terreno. Además de la sensación de bienestar que los árboles otorgan al ser humano, ofrecen alimentos, son fuente de energía, y sirven como materia prima en diversas confecciones.

Por otra parte, los árboles amortiguan el calentamiento de la atmósfera y mejoran la calidad del aire cuando filtran el viento que pasa entre sus hojas. En el proceso de fotosíntesis toman el dióxido de carbono y lo convierten en oxígeno, menguando así un peligroso gas responsable del efecto invernadero. Estos enormes organismos sirven para delimitar terrenos y atenuar el ruido en las ciudades.

Siembra un futuro verde para tu hijo

un futuro verde para tu hijo

Siembra árboles y plantas ornamentales en cualquier pedacito de terreno que tengas en tu hogar. Si tu vivienda carece de suelo invita a tu hijo a salir en busca de tierra fértil para llenar varias macetas y hacer un jardín interior en alguna de las habitaciones. Incluso en todas. Las plantas suelen ser excelentes para la decoración de cualquier espacio.

También, vayan juntos a comprar las plantas ornamentales que sembrarán en las vasijas y todos los implementos que necesitarán para plantarlas y cuidarlas: guantes, pala, tenedor, regadera… Si tienes espacio en campo abierto compren las semillas de las especies de árboles que más les gusten, las autóctonas de la región donde viven o aquellas que se encuentran en peligro de extinción.

De esta forma estarán contribuyendo con su granito de arena a la conservación de la flora. Hazle saber a tu pequeño sobre las atenciones culturales que, regularmente, hay que brindarle a los árboles y las plantas. Deshierbe, regadío, luz… que sepa que esto es imprescindible para que mantengan su esplendor.

Un  futuro verde para tu hijo: estimula la investigación

Por otra parte, Estimúlalo a investigar sobre la flora que siembran y las enfermedades que pueden aquejarla. Reciclen juntos los desechos orgánicos de casa para convertirlos en abono orgánico con el cuál alimentar el suelo y, por ende, ofrecerle más nutrientes a los árboles y las plantas.

También, explícale que los biofertilizantes no son dañinos para el medio ambiente como sí puede suceder con los fertilizantes químicos que se expiden en el mercado. Si siembras un futuro verde para tu hijo y él participa en esta actividad estarás creando a un ser ecologista.

Educarás a alguien que mañana se preocupará por revertir el nocivo efecto que nuestra generación le causó al planeta de todos. Háblale a tu hijo sobre la responsabilidad que tiene con la naturaleza y la preservación de la vida.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.