Señales que indican que un niño piensa en el suicidio

Es muy importante estar atentos a las posibles señales de pensamientos suicidas en los niños. Te contamos todo lo que debes saber a continuación.
Señales que indican que un niño piensa en el suicidio
María José Roldán

Escrito y verificado por la psicopedagoga María José Roldán.

Última actualización: 12 enero, 2021

Desgraciadamente, el suicidio llega muchas veces sin avisar, sin esperarlo, sin saber por qué ha pasado todo. Por eso, es necesario estar atento a las señales, porque serán las que nos indiquen que algo pasa y las que nos puedan ayudar a frenar esos pensamientos atroces de la mente de un menor. Vamos a hablarte sobre señales que indican que un niño piensa en el suicidio.

El suicidio en los niños es algo que realmente ocurre, aunque el mundo adulto quiera mirar hacia otra parte pensando que nunca les tocará en el seno de su familia. El suicidio aparece cuando la persona (a cualquier edad) no encuentra otra salida al sufrimiento y dolor tan profundo que siente. Es una tristeza profunda que distorsiona y oscurece el pensamiento.

Es cierto que es horrible pensar que los niños, estando en la flor de la vida, siendo tan inocentes, sean capaces de quitarse la vida. Aunque pensamos que la infancia debe ser una etapa de felicidad absoluta para los más pequeños, no siempre es así. Por eso, es necesario saber cuáles son las señales más sutiles.

Niño mirando por la ventana pensado en el suicidio.

El suicidio en la infancia

El suicidio en la infancia ocurre entre los 5 y los 14 años, y es a partir de esta edad cuando puede llevarse a cabo con más éxito; de hecho, es una de las causas más probable de muerte en chicos y chicas jóvenes.

En la adolescencia es más crítico en el desarrollo, porque se sienten presionados, más estresados, cuestionan su identidad, se alejan de la familia, se aíslan, se sienten desprotegidos, tienen distorsiones de la realidad, pueden aparecer trastornos de la personalidad difíciles de diagnosticar por la volatilidad de la etapa en la que se encuentran, etc.

Cuando un niño o adolescente no consigue encontrar una red de apoyo sólida en amigos o familiares, se siente abandonado. Este sentimiento de abandono para ellos es incluso peor que la muerte.

Es necesario ser conscientes de que el suicidio se puede prevenir con un buen asesoramiento profesional y, en muchos casos, con la intervención de un especialista. Pero además de la importancia de la intervención profesional, es muy importante estar atentos a las señales que se pueden detectar para poder pedir ayuda al especialista lo antes posible.

Señales que indican que un niño piensa en el suicidio

Existen algunas señales que pueden indicar que un niño se quiere suicidar. Si piensas que tu hijo cumple alguna de ellas, entonces es necesario que busques ayuda profesional cuanto antes.

  • Presenta pocas habilidades sociales.
  • Le cuesta o no pide ayuda.
  • Si pide ayuda, lo hace de una manera tan sutil que es complicado darse cuenta.
  • Consideras que es un niño más maduro, tanto emocionalmente como físicamente.
  • Tiene inflexibilidad cognitiva.
  • Le cuesta ceder ante opiniones que difieren a las suyas.
  • Suele tener pensamientos pesimistas sobre la vida.
  • Presenta baja autoestima o tiene un comportamiento tímido o retraído.

Por supuesto, aunque estas señales no tienen que ser significativas, la realidad es que si crees o intuyes que tu hijo puede tener este tipo de pensamientos, entonces tendrás que buscar ayuda cuanto antes.

Circunstancias que pueden hacer que el niño tengan tendencias suicidas

Existen algunas circunstancias que pueden hacer que los niños tengan pensamientos suicidas. Algunas de estas circunstancias pueden ser las siguientes:

  • Depresión.
  • Trastornos afectivos o de conducta.
  • Trastornos de personalidad.
  • Padecer acoso escolar.
  • Intentos de suicidios previos.
  • Problemas académicos.
  • Demasiada exigencia sobre su persona.
  • Pérdida de un ser querido.
  • Divorcio de los padres.
  • Violencia o maltrato de algún tipo.
    Niña muy triste con un oso de peluche mientras piensa en el suicidio.

La mejor protección para un niño que piensa en el suicidio

La mejor protección siempre será observar el comportamiento del niño desde cerca y no mirar hacia otra parte cuando se le vea triste o afectado por algún motivo en concreto. El mayor factor protector frente al suicidio es contar con un apoyo familiar sólido.

Para que un niño pida ayuda tenemos que estar siempre disponibles. En cualquier momento, en cualquier lugar. Debe saber que siempre estaremos a su lado, sin que nada nos importe más. Es necesario decírselo y recordárselo porque necesita que lo hagamos.

Aunque tú sepas que siempre estarás a su lado, si su percepción le impide verlo, entonces no lo tendrá tan claro. Debes decírselo y también demostrárselo con tus acciones. Para ello, tendrás que tener un buen acercamiento y abrir siempre la vía del diálogo y la comunicación.

Muestra tu preocupación diciéndole frases como “quiero ayudarte”. Valida sus emociones para que aprenda a canalizarlas correctamente y que en ningún momento se sientan juzgados. Transmite que los problemas son temporales en la vida, que siempre se puede buscar una solución. Es importante trabajar la autoestima, las relaciones sociales y que tenga un entorno agradable en su vida.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.