No quiso cuidar a sus nietos y prefirió viajar: ¿es válida o egoísta la actitud de esta abuelita?

Esta abuela brasilera cumplió el sueño de recorrer el mundo después de cumplir sus 62 años. El evento viral ha dividido las opiniones.

Josefa Fitosa, una abuelita brasilera, decidió dejar su país e irse a recorrer el mundo. La decisión fue tan radical que ni siquiera contempló la idea de quedarse a cuidar a uno de sus nietos.

Ese siempre fue su sueño, jubilarse después de haber laborado durante largos años como trabajadora social y darse la oportunidad de encontrar libertad. Por esa razón, cuando este momento llegó, abandonó su casa, vendió todas sus pertenencias e inició la aventura con una sola maleta de mano.

La travesía inició desde 2017, año en el que recorrió Europa. Después, regresó a Brasil solo para alquilar su casa y a partir de 2018 volvió a retomar su actividad mochilera. De esa manera, también llegó a pisar tierras africanas y asiáticas.

Josefa ha conocido un total de 40 países. Sin embargo, siempre que se le presenta la oportunidad ha afirmado que la intención es terminar de conocer la mayor cantidad que pueda.

El camino que abordó para compartir las experiencias y motivar a los demás a luchar por sus sueños fue el de las redes sociales. No obstante, desde el primer momento recibió múltiples críticas por no pasar la tercera edad al lado de su nieto.

A causa de ello, la abuelita no dudó en defenderse. “Hay mucha vida fuera de esa caja llamada hogar. Uno no se convierte en abuela para cuidar a su nieto”, afirmó Josefa Fitosa.

¿Qué dicen los expertos de la decisión de la abuelita?

Algunos especialistas han encontrado razones para entender el comportamiento. Una de ellas es que muchos abuelos necesitan tener proyectos y un espacio personal para llevar el día a día a su ritmo y encontrar plenitud.

Además, aunque una gran cantidad de abuelos se sienten realizados al cuidar a los nietos, no hay un manual que indique que ese debe ser el destino de todos. De hecho, si una persona es forzada a pesar de no sentirse preparada, puede poner en riesgo su salud mental y física