No existe edad ideal para concebir un hijo. Sin embargo, al ser padres jóvenes, tendrán que enfrentar ciertas situaciones. Tenemos algunos consejos que te ayudarán a superarlas.
Concebir a temprana edad disminuye problemas de fertilidad y los riesgos para la madre y su bebé.
Criar a un niño cuando estás aún en la veintena hace más sencillo ocuparse de las tareas que requiere el cuidado infantil.
Los progenitores más jóvenes se encuentran más en contacto con los intereses y el lenguaje de los menores. Esto facilita la relación con sus hijos.
La impulsividad y la falta de previsión a futuro son características de los adolescentes, pero no son buenas cualidades para un padre o una madre.
Con un hijo, las rutinas, prioridades, metas e intereses de los padres suelen cambiar. Esto puede llegar a confundir a los progenitores jóvenes con sus propios roles.
Los padres jóvenes no siempre cuentan con los medios para criar a un infante y la poca formación puede afectar la búsqueda de un empleo.
Ser padres implica mucha entrega, dedicación y es una decisión que debe tomar responsablemente.
Aquí encontrarás algunos consejos para madres jóvenes: