Cómo elegir la mejor mascota para tu hijo
Incorporar una mascota en casa es una decisión muy importante que se debe tomar en familia. Si se acoge una mascota en casa no debe ser para satisfacer los deseos de un niño por capricho de tenerla, sino porque es una decisión y todos están de acuerdo para la llegada de un nuevo miembro de la familia. Porque una nueva mascota es eso, un nuevo miembro de la familia y se debe tratar como tal.
Cuando se decide tener una mascota en casa, hay que conseguir que los niños sean conscientes de que los animales requieren unos cuidados específicos, y deberá saber cuál será el que le corresponda realizar a él.
Además, las mascotas como seres vivientes que son, necesitan atención y amor de su nueva familia, que en este caso seréis vosotros. Necesitan todo el cariño del mundo, y cuando se convierta en vuestro nuevo miembro de la familia, solo os aportará felicidad.
Recuerda que será vuestra obligación atenderle, que tenga asistencia médica siempre que lo necesite, que esté bien alimentado, que pueda hacer ejercicio y que no le falte amor ni un solo día de su vida. Pero cuando todo esto ya se tiene en cuenta y se es consciente de los beneficios de tener un animal como miembro de la familia, ¿cómo se debe elegir la mejor mascota para los niños?
Aspectos a tener en cuenta para elegir la mejor mascota para tu hijo
Es posible que tu hijo quiera tener un gato o un perro, pero cuando se trata de elegir a las mejores mascotas para los niños hay que tener en cuenta que no todas las razas de animales son amigables.
Algunos son demasiado enérgicos o quizá agresivos, mientras que otros pueden ser asustadizos. También hay animales que pueden tolerar el juego brusco con los niños más pequeños y otros que son más propensos a morder o a arañar.
Incluso puede que algunos animales sean portadores de enfermedades o bacterias que sean perjudiciales para la salud de los niños más pequeños.
Además, si tu hijo es alérgico a los animales o tiene otros problemas de salud, es un motivo más que suficiente para que consideres realmente si es oportuno tener una mascota o si es mejor elegirla con prudencia.
Es necesario que os hagáis una pregunta: cómo familia, ¿sois capaces y estáis dispuestos a proporcionar la atención, espacio y respeto que la mascota necesitará?
Las mascotas, sobre todo cuando son cachorros, necesitarán un trato delicado y especial, y se necesita tener paciencia y energía para poder atender a un animal correctamente. Aunque un perro o gato adulto y bien educado puede ser una buena opción.
Cuáles son los mejores animales domésticos para niños
Si como familia tenéis la decisión de introducir a una mascota en casa, entonces es el momento de escoger el mejor animal. Si creciste con un perro quizá quieras un perro, si vives en un piso pequeño quizá un gato es la mejor opción, si prefieres que no tengas que lidiar mucho con sus cuidados entonces quizá un pez antes de tener otro tipo de mascota. Hay que reflexionar muy bien antes de decidir.
Los perros, una mascota muy elegida por las familias
Un perro es una mascota leal. Las razas más grandes pueden ser más tolerantes a los juegos de los niños, pero las razas más pequeñas suelen ladrar y morder con más facilidad. Pero cada perro es diferente y tiene su propia personalidad, por lo que deberás conocer al cachorro antes de adoptarlo para saber si realmente es adecuado para tu estilo de vida. También puedes conseguir información de su criador o refugio de animales.
Los gatos
Un gato es una mascota ideal para los niños más tranquilos porque los gatos pueden ser menos tolerantes a los juegos bruscos de los niños. Pero hay ciertas razas de ellos que se consideran más aptos para niños que otras, deberás conocer al gato para saberlo.
Los peces
Los peces pueden parecer una mascota ideal porque el mantenimiento puede ser relativamente fácil, pero solo se puede mirar. Aunque esté metido en el agua, también puedes enseñar responsabilidad a los niños para su alimentación y cuidados.
Conejos de indias
Los conejos de indias pueden estar en una jaula y pueden ser una buena apuesta porque son tiernos y pocas veces muerden, sobre todo cuando se sienten protegidos y seguros. Pero son pequeños y muy delicados, por lo que no son una buena idea para niños menores de 6 años. Aunque es necesario supervisar siempre a los niños cuando esté jugando con su mascota.
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