Qué debes preparar antes de que llegue el bebé

Qué debes preparar antes de que llegue el bebé
María José Roldán

Escrito y verificado por la psicopedagoga María José Roldán.

Última actualización: 10 abril, 2020

Si estás esperando un bebé, es más que probable que tengas gran emoción por lo que significa que llegue tu bebé a tu vida. En este sentido tendrás muchas cosas en la cabeza para que cuando llegue el momento de tener a tu bebé en tus brazos esté todo preparado. Hay muchas cosas que debes preparar antes de que llegue el bebé a tu vida y por eso, es bueno que tengas algunas ideas en la cabeza.

Algunas compras para el bebé

Existen algunas compras que no puedes dejar de lado para que cuando nazca tu bebé lo tengas todo a mano. Por ejemplo, deberás tener ropita de bebé para que cuando nazca tenga ropa que poner, así como ropa interior, calcetines y un gorrito. Pero no compres demasiada cantidad de ropa de bebé de recién nacido porque los bebés crecen muy rápido y se le quedará la ropa pequeña en cuestión de días.

También tendrás que comprar pañales, toallitas, cremas para bebé… es decir, todos los productos de higiene necesarios para tu bebé recién nacido. Tampoco podrás olvidarte el comprar todos los productos de alimentación que precises pero sin necesidad de pasarte comprando cosas caras o en demasiada cantidad. Es mejor tener buenos productos y que sean los justos.

Los chupetes también son una buena idea de compra para los bebés, ya que les ayudan a relajarse y tranquilizarse en momentos de llanto -siempre y cuando estén a tu lado y tú les transmitas todo tu amor-.  Y  por supuesto no podrás olvidar algunas compras para transportar a tu bebé como los cuelga bebés o los carritos de paseo. ¡Y ten la canastilla del hospital preparada también!

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La habitación del bebé

Si hay algo que seguramente tendrás en mente es la habitación de tu bebé. Toda futura mamá sabe lo importante que es tener una habitación preparada para la llegada del bebé, o al menos tener la minicuna o la cuna, un armario para guardar su ropita o una cómoda para el mismo fin.

Preparar la habitación del bebé sin duda es una de las cosas que más gustan a los padres, pero suele haber la misma preocupación: cómo prepararla para cuando llegue a casa el bebé.

Para la decoración del dormitorio del bebé es fundamental conocer las medidas que tiene la estancia y así saber del espacio exacto del que se dispone para poder colocar los muebles y preparar también el dormitorio para cuando vaya creciendo el bebé y se convierta en niño.

Es muy importante tener en cuenta el crecimiento del bebé para poder decorar la estancia y tener muebles, que si son evolutivos, mucho mejor. De ésta manera podrás aprovechar los mismos muebles durante mucho más tiempo ahorrando espacio, dinero y energías.

Al principio necesitarás una cuna y un armario. Hay quienes te dirán que también necesitarás un cambiador, pero ésto es opcional porque si tienes una buena cama, también es buena idea que lo cambies en la cama y de éste modo ahorras en espacio y en dinero. También, a medida que vaya creciendo será buena idea que tenga un juguetero, una mesita y una silla para poder jugar con plastilina, dibujar, etc.

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El ambiente en el dormitorio de tu bebé tendrá que ser muy confortable, deberá sentirse seguro y cómodo todo el tiempo. Una idea estupenda es poner cortinas para poder regular la luz que entra por la ventana, aunque si no tienes presupuesto para cortinas, con la persiana también puedes controlarlo bien. Lo ideal es que durante el día haya una luz indirecta mientras hace sus siestas por si se despierta que sepa distinguir cuándo es de día de cuándo es de noche.

Es necesario escoger los colores suaves para las paredes, no escojas colores fuertes ni muy llamativos. Los colores suaves aportarán tranquilidad, algo necesario para el bebé. A medida que tu bebé vaya creciendo deberás tener en cuenta algunas medidas de seguridad como proteger los enchufes o las esquinas.


El contenido de Eres Mamá es solo para fines educativos e informativos. En ningún momento sustituye el diagnóstico, el consejo o el tratamiento de un profesional. Ante cualquier duda, es recomendable la consulta con un especialista de confianza.