Cómo dar las uvas con las campanadas a los niños

¿Sabes cómo dar las uvas con las campanadas a los niños sin que se atraganten? Te damos unos trucos básicos para que los pequeños las tomen sin peligro.
Cómo dar las uvas con las campanadas a los niños
Silvia Zaragoza

Escrito y verificado por la nutricionista Silvia Zaragoza.

Última actualización: 30 diciembre, 2020

Ya no queda nada para despedir el año y en España la tradición es tomarse las 12 uvas de la suerte. Aunque se trata de una costumbre muy saludable, puede ser causa de atragantamiento, especialmente entre los más pequeños. Por eso, queremos explicar en las siguientes líneas cómo dar las uvas con las campanadas a los niños. 

Pero antes de todo, ¿conoces cuál es su origen? Por un lado, empezó a implantarse a partir de 1880 por la burguesía hasta que se extendió entre la población a partir de 1893. Por lo que todo el mundo se animó a comprarlas. Y así fue como a las 12 de la noche del 31 de diciembre empezaron a comerse 12 uvas con el objetivo de dar la bienvenida al año nuevo.

Por otro lado, se dice que en 1909 los productores de Alicante vendieron su excedente de uvas de una manera que llamó la atención, aunque solo es un rumor. Además, son bastante económicas y fáciles de encontrar en cualquier tienda de alimentación. 

Como se mencionaba al principio, es importante que los niños coman fruta a diario, ya que las uvas aportan gran cantidad de fibra, vitaminas como la A, folato y la C, además de minerales como potasio, magnesio y calcio.

Uvas de la suerte para despedir el año y que los niños no se atraganten.

También son fuente de antioxidantes, que le dan el color y reducen el deterioro de las células. Además, esas 12 uvas corresponden a una ración completa de las 3 que se recomienda consumir a diario. ¡Hasta pueden comerlas los niños que tengan diabetes!

¿Cómo dar las uvas con las campanadas a los niños?

En primer lugar, lo más importante es tener en cuenta el momento de introducir esta fruta en la alimentación de los niños. Generalmente, se da a partir de los 6 meses y siempre bajo la vigilancia de un adulto.

Además, se trata de un alimento con forma redonda, lo que favorece el atragantamiento. Así que, acorde a las recomendaciones, es preferible dárselas partidas en cuartos o trozos pequeños. Además, es importante que hagas esto hasta que alcance los 3 años.  

Es mucho mejor que se las ofrezcas peladas y sin las pepitas. Y aunque dispongas de envases que ya vienen así, es preferible que lo hagas tú misma o te ayuden a hacerlo. Esas opciones suelen estar bañadas en almíbar, por lo que llevan gran cantidad de azúcar añadido además del natural. Asimismo, evitarlas reducirá el riesgo de que su paladar se acostumbre al dulzor y que desarrolle obesidad o diabetes en el futuro. 

Una vez que ya los niños hayan desarrollado por completo los dientes y la masticación, ya no es necesario que se las des sin la piel. Y a partir de los 4 años ya las podrán comer enteras. Sin embargo, observa si presenta algún signo de atragantamiento, como dificultad para respirar, tos débil, coloración azul de la piel o incapacidad para llorar. A continuación, te contamos cómo actuar en ese momento. 

¿Cómo actuar frente al atragantamiento por uvas en niños?

Primero de todo, intenta mantener la calma y evita introducir las manos en la boca al niño o darle golpecitos en la espalda. Ten en cuenta que si se trata de un bebé debes colocarlo boca abajo sobre el antebrazo. A continuación, dale 5 golpes fuertes y rápidos en los omóplatos.

Si todavía no ha conseguido expulsar el trozo, ponlo boca arriba sosteniéndole la cabeza. Ahora coloca dos dedos en la mitad del esternón y realiza 5 compresiones. Ve alternando ambos procesos hasta que lo elimine. 

En el caso de los niños más mayores, lleva a cabo la maniobra de Heimlich. Ambas maniobras hay que llevarlas a cabo siempre y cuando no tosa o presente un llanto fuerte. Si aún así pierde el conocimiento, pide ayuda y haz la reanimación cardiopulmonar.

Uvas de fin de año.

Consejos sobre cómo dar las uvas con las campanadas a los niños 

También es necesario que sea el proprio niño quien las coja con la mano y las coma. De esta manera, podrá regularlo a su ritmo que, a su vez, reducirá todavía más el riesgo de atragantamiento.

Además, si no le da tiempo a terminarlas o comer una por cada campanada no pasa nada. Es normal y lo importante es que mastique bien y esté tranquilo. Por esta razón, tampoco le metas prisa, por su seguridad. 

Por último, evita cualquier tipo de distracción mientras está comiendo y permanece atento al momento de comer cada uva. También es importante que permanezca sentado y erguido para facilitar que pueda escupir cualquier trozo sin problemas. Esperamos que sigáis éstos consejos y empecéis todos muy bien el año.


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  • BBC. (2018) Por qué se comen 12 uvas a la medianoche y el origen de otras tradiciones de Nuevo en América Latina. Disponible en: https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-3837443
  • El Comidista (2017) ¿Por qué comemos uvas en nochevieja y roscón en reyes? Disponible en: https://elcomidista.elpais.com/elcomidista/2016/12/22/articulo/1482404021_411019.html
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