Aspectos legales de la baja maternal

En España y en toda Europa se han ido consiguiendo importantes avances en lo que rodea a la mujer embarazada y a la baja maternal. Sin embargo, los aspectos legales y la normativa todavía tienen que regular mejor las diferentes situaciones que se producen con las trabajadoras.

Revisado y aprobado por la médica María Belén Del Río.

Escrito por Francisco María García

Última actualización: 25 junio, 2020

Un embarazo puede significar una gran preocupación para las mujeres en el ámbito laboral. A pesar de que en España la ley ha establecido ciertos permisos pensados especialmente para las mujeres embarazadas y su correspondiente baja maternal, la situación en la práctica no siempre es sencilla.

Muchas mujeres temen ser despedidas al informar a su empresa de su embarazo o durante la baja maternal después del parto. Es por eso que es muy importante que las mujeres que estén embarazadas o que planeen estarlo, se informen muy bien sobre sus derechos y todas las posibilidades que tienen.

A continuación, veremos algunos elementos para conocer mejor los aspectos legales de la baja maternal.

¿Qué es la baja maternal?

Con el fin de conciliar la vida familiar y laboral, la legislación española ha establecido una serie de permisos para las mujeres que están embarazadas. Se trata de un período de descanso laboral, fundamental para cuidar la salud de la madre y del hijo durante y después del embarazo.

Esta prestación también tiene como finalidad que la mujer conserve su estabilidad económica y laboral. En efecto, uno de los aspectos legales más importantes de la baja maternal es que la empresa está obligada a volver a incorporar a la mujer, una vez que se termina el periodo de baja, en el mismo puesto de trabajo.

Baja laboral durante el embarazo: aspectos legales

Las mujeres que tengan un embarazo normal, sin complicaciones particulares, pueden seguir trabajando durante todo el embarazo. Además, pueden ausentarse para realizarse los exámenes y pruebas prenatales correspondientes. También pueden hacerlo para asistir a los cursos de preparación del parto.

Si las condiciones propias del trabajo ponen en riesgo el embarazo, la mujer podrá ser transferida a otro puesto que no implique ningún riesgo. Si esto no es posible, la trabajadora puede solicitar una baja laboral por riesgo durante el embarazo. Permanecerá en esa situación hasta el parto sin que se le pueda descontar estos periodos del permiso de maternidad.

Cuando la trabajadora embarazada debe solicitar una baja laboral por enfermedad, las formalidades y los aspectos legales serán los mismos que cualquier baja por contingencias comunes. El médico de cabecera será el encargado de darla.

Permiso de maternidad: aspectos legales

El permiso de maternidad actualmente es de 16 semanas, contadas a partir del parto. Si se trata de un parto múltiple o el bebé tiene algún tipo de discapacidad, se añadirán dos semanas más.

En caso de que el niño sea prematuro o deba permanecer hospitalizado durante más de siete días, el permiso se puede extender por el número de días que permanezca en el hospital. Esta situación puede generar un máximo de 13 semanas adicionales de baja.

Es necesario hacer una aclaración en los aspectos legales de la baja maternal. Dentro del permiso de maternidad, existe un descanso obligatorio de seis semanas inmediatamente después del parto.

Existe también el permiso de maternidad solicitado por la madre que tiene una duración de 16 semanas, con las posibilidades de extensión en los casos que acabamos de describir. La mujer puede decidir empezar este período antes del parto.

Es importante que las mujeres embarazadas conozcan también lo que pasa con sus vacaciones. Si durante el año han gozado de la baja de maternidad y no han tomado las vacaciones que le corresponden, las pueden solicitar para disfrutarlas al terminar el periodo de baja.

Requisitos para solicitar la prestación de baja maternal

Para solicitar la prestación de baja a la Seguridad Social, la empresa en la que trabaja la mujer embarazada deberá emitir un certificado indicando la fecha de inicio de la suspensión laboral. Ninguna empresa puede negarse a hacerlo.

Según nuestra legislación, el trámite se realiza a través del formulario correspondiente, acompañado del DNI y del certificado de la empresa. La Seguridad Social tiene un plazo de 30 días para resolverlo. De esta forma, se gradúa el requisito de cotización según la edad de la mujer embarazada.

Las mujeres menores de 21 años al momento del parto no necesitan ninguna cotización. Si tienen entre 21 y 26 años, necesitan 90 días de cotización dentro de los siete años anteriores a la fecha del descanso o 180 días cotizados a lo largo de su vida laboral.

Para finalizar con este análisis de edad, las mujeres mayores de 26 años requieren 180 días de cotización en los siete años anteriores o 360 a lo largo de la vida laboral.