Tips para una correcta higiene bucal infantil

Tips para una correcta higiene bucal infantil
Pedro González Núñez

Escrito y verificado por el educador infantil Pedro González Núñez.

Última actualización: 08 mayo, 2020

Aunque no lo creas, en verano las posibilidades de que aparezcan caries en tu boca se multiplican. Al subir las temperaturas, estamos más tiempo fuera de casa. Ello se traduce en que los pequeños cenan fuera, toman helados y se lavan menos los dientes. Estas prácticas favorecen sin que nos demos cuenta la aparición de problemas bucales. Por eso, hoy queremos presentarte algunos tips para mantener la higiene bucal infantil.

Consejos para una correcta higiene bucal infantil

Beber agua

Si es importante hidratar la piel, la boca no lo es menos. Piensa que con calor perdemos más líquido. De ahí que hidratarse de manera correcta ayude a prevenir infecciones e inflamaciones en la boca.

Ten en cuenta también que la falta de saliva hace que aumente la aparición de placa bacteriana. Esto puede hacer que se acaben desarrollando infecciones en las encías.

Tener una alimentación sana

Para una higiene bucal infantil perfecta, hay que seguir una dieta sana. Los alimentos de temporada serán los protagonistas. Esta es sin duda una de las claves.

Tanto la fruta como la verdura se pueden convertir en unos aliados excelentes para llevar a cabo comidas ligeras y con alimentos que contengan un alto porcentaje de agua. Apuesta por productos que tengan un alto contenido en calcio, excelentes para unos dientes fuertes.

Las frutas y verduras contribuyen a una higiene bucal correcta para niños y adultos

No abusar de los productos azucarados

Si hay un enemigo de los dientes, ese es el azúcar. Además, no es una novedad que con el calor se beben más bebidas granizadas, más refrescos y se toman más helados. Esto puede traer consecuencias negativas para la salud de tus dientes.

Para evitar que esto se acabe convirtiendo en un problema, intenta establecer un límite y trata de que se laven los dientes inmediatamente después de ingerirlos. Las bebidas azucaradas hacen que el esmalte se oscurezca, lo que se traduce en una aparición de las caries más rápida.

Cuidar la rutina de higiene

Con la llegada del verano y el calor solemos pasar más tiempo fuera de casa. Por eso es importante mantener la rutina de higiene bucodental. No olvides que hay que lavarse los dientes un mínimo de 3 veces al día y que cada cepillado tiene que durar al menos 2 minutos. Así mismo se recomienda usar seda dental y enjuague para para que la limpieza sea más efectiva y profunda.

Siempre que viajes incluye en tu maleta un kit de higiene bucal infantil de emergencia. Dicho kit debe contener un cepillo, colutorio y pasta de dientes. Ten en cuenta que abandonar los hábitos de higiene bucal durante las vacaciones, por ejemplo, o durante los días libres que pasamos fuera de casa, es una de las causas comunes de la aparición de caries dentales.

Proteger los labios del sol

Aunque pueda parecer que los labios no necesitan protección solar, nada más lejos de la realidad. Igual que no dudarías en proteger la piel de tu hijo cuando vais a la playa, no debes dudar tampoco de que sus labios necesitan de un cuidado similar. Usa un buen cacao con protección para cuidarlos. La exposición solar es un factor de riesgo para el desarrollo de cáncer oral.

Evitar los cambios bruscos de temperatura en las comidas

Muchos de los alimentos y bebidas frías que consumimos durante el verano pueden provocarnos molestias e hipersensibilidad dental. Para evitarlo, tu hijo tendrá que cepillarse los dientes tras comer con movimientos de rotación suaves o de barrido desde la encía hacia el diente. También es aconsejable recurrir a pastas o geles dentífricos específicos para el tratamiento de los dientes sensibles.

Nadar sí, pero con prudencia

Aunque quizá nunca lo hayas pensado, nadar en exceso puede erosionar y debilitar tus dientes. Esto se debe al alto contenido de cloro que encontramos en la mayoría de piscinas. Así que si tus pequeños van a natación, presta atención al estado de sus dientes con regularidad.

Así pues, que se laven los dientes después de nadar para evitar los posibles daños que puedan provocar los productos químicos de la piscina. Un ejemplo de este tipo de problemas es la patología conocida como “sarro del nadador“, siendo común en los deportistas de élite que practican natación.

Después de nadar es recomendable lavarse los dientes para evitar la aparición de sarro

Si haces deportes de contacto, cuidado con tus dientes

Si tus hijos hacen algún deporte de contacto, ten en cuenta que será recomendable que usen protectores bucales para preservar sus dientes de posibles fracturas o traumatismos bucales.

Además, recuerda que es aconsejable visitar al dentista al menos una vez al año para realizar una limpieza bucal en profundidad. Cuidar la salud bucal debe ser una de las prioridades tanto para los niños como para los adultos.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.