Semana 2 del embarazo: síntomas, desarrollo del bebé y recomendaciones
Aunque te parezca extraño, ¡todavía no estás embarazada! En la semana 2 del embarazo el cuerpo se prepara para la ovulación y será al final de la misma cuando un espermatozoide fecundará a un óvulo, dando lugar a la nueva vida. Incluso, en algunas mujeres esto termina ocurriendo en la semana 3.
Ese óvulo fecundado, conocido como cigoto, viajará hasta el útero para convertirse en tu bebé durante los próximos meses. Y ahora que ya sabes cómo comienza el viaje del embarazo, veamos qué sucede exactamente en esta semana.
Desarrollo del bebé en la semana 2 del embarazo
Aunque aún no hay un embrión, tu cuerpo se encuentra en el proceso de ovulación que espera la fecundación. Veamos a continuación en detalle.
Ovulación
En este momento se produce un aumento de los niveles de estrógeno y progesterona, lo que causa que el revestimiento del útero se haga más espeso y pueda ser capaz de sostener a un óvulo fertilizado.
Al mismo tiempo, en los ovarios, los óvulos están madurando en unos sacos llenos de líquido que reciben el nombre de folículos.
Fecundación en la semana 2 del embarazo
La fecundación, por su parte, consiste en cuatro etapas:
- Salida del óvulo del folículo: cuando ovulas, uno de los óvulos sale del folículo y se traslada a una de las trompas de Falopio.
- Viaje del esperma a las trompas de Falopio: en las siguientes 24 horas, ese óvulo será fecundado por uno de los casi 250 millones de espermatozoides que son expulsados en una eyaculación y nadan desde la vagina, el cuello uterino y el útero hasta las trompas de Falopio.
- Combinación de los genes: entre las próximas 10 y 30 horas, el núcleo de los espermatozoides se fusionará con el óvulo y combinarán su material genético. En este momento pueden ocurrir dos escenarios Si el esperma tiene un cromosoma Y, tu bebé será un niño. Si el esperma tiene un cromosoma X, tu bebé será una niña. A este óvulo fertilizado se le conoce con el nombre de cigoto.
- Implantación del óvulo en el útero: por último, el óvulo se tomará entre 3 a 4 días para trasladarse desde la trompa de Falopio hasta el útero, proceso en el que se dividirá en más de 100 células idénticas. Una vez en el útero, pasa a llamarse blastocisto. Entre 1 y 2 días después comenzará a excavar el revestimiento uterino, donde se situará y continuará su crecimiento y división.
Tu cuerpo en la semana 2 del embarazo
Aún no estás embarazada, pero en la segunda semana se pueden presentar síntomas de la ovulación que te ayudarán si tu deseo es tener un bebé. Estos signos avisan de la ovulación y sirven para planificar las relaciones sexuales con mayor probabilidad de concretar un embarazo.
1. Moco cervical con apariencia similar a la de clara de huevo
El moco cervical es la secreción que puedes encontrar en ocasiones en tu ropa interior. Sin embargo, cuando se acerca la ovulación se vuelve claro, delgado y resbaladizo; una consistencia que ayuda a los espermatozoides en su viaje hacia el óvulo.
2. Calambres leves
A veces se pueden experimentar calambres leves o punzadas de dolor en el abdomen y la espalda durante la ovulación. Esta sensación recibe el nombre de síndrome de mittelschmerz o dolor pélvico intermenstrual. Esa palabra rara para describirlo, en realidad está en alemán, y significa ‘dolor del medio’.
3. Aumento del deseo sexual
Es común que tu libido aumente durante la época en la que eres más fértil. Incluso tu olor corporal será más atractivo para los hombres, según lo que postulan las teorías de las feromonas.
4. Mejor sentido del olfato
Así como tu olor será más atractivo, tu sentido del olfato será mucho más sensible. Se cree que esta es la forma en la que el cuerpo te ayuda a percibir las feromonas del sexo opuesto.
5. Dolor leve en los senos
Es posible que por los cambios hormonales propios de la ovulación sientas los senos llenos y doloridos.
6. Aumento en la temperatura basal
La temperatura basal es una gran aliada para determinar si estás ovulando, ¡así que mídela todos los días en esta etapa! Esto se debe a que aumenta unas jornadas después de comenzar la ovulación y se mantiene hasta el próximo período. Ese pequeño movimiento de grados es un aviso.
7. Cambios en el cuello uterino
El cuello uterino se vuelve más suave, húmedo y abierto durante la ovulación.
Si planeas convertirte en mamá, un tacto vaginal podría ayudarte a descubrir el momento más propicio y más receptivo.
Consejos y recomendaciones en la semana 2 del embarazo
Además de lo anterior, es probable que quieras estar al tanto de si debes asistir a una cita médica o hacerte una prueba en la semana 2 del embarazo. Del mismo modo, te daremos algunos consejos útiles para este momento.
¿Qué pruebas debo realizarme?
Son varias las pruebas y visitas médicas que podrías considerar esta semana. Entre ellas destacamos las siguientes:
- Test casero de ovulación: parte de planear tu embarazo es saber cuándo estás ovulando y así aumentar las probabilidades de la concepción. Para ello, podrías adquirir un kit predictor de la ovulación. Este se encarga de medir los niveles de la hormona luteinizante (LH) producida por la glándula pituitaria y encargada de señalar la liberación de los óvulos de los folículos y preparar el útero para recibir el cigoto.
- Test de portadores: es probable que tanto tú como tu pareja queráis realizar esta prueba genética para averiguar si tenéis genes que podrían poner en riesgo la vida de vuestro futuro bebé.
- Visitar al médico antes de la concepción: esto puede ser una buena idea si quieres determinar que tu cuerpo está en las mejores condiciones para albergar a un bebé. Del mismo modo, podrías consultar cuáles son los medicamentos o suplementos más recomendados.
¿Qué consejos debo seguir a partir de la semana 2 del embarazo?
Además de las pruebas y visitas médicas, hay otros consejos que podrías tomar en cuenta durante estos días:
- Comienza a tener relaciones sexuales con regularidad: en esta semana, aún no estás embarazada, pero ya que te encuentras en tu ciclo fértil, es el momento idóneo para tener relaciones sexuales con regularidad y aumentar tus probabilidades de concebir.
- Cuida tu cuerpo: tu cuerpo debe estar en las mejores condiciones para esta nueva etapa, por esta razón, comienza a cuidarlo tomando mucha agua, comiendo alimentos saludables y dejando atrás hábitos perjudiciales, como fumar. También se aconseja dejar de beber alcohol y hacer ejercicios moderados con frecuencia.
- Toma ácido fólico: no es demasiado pronto para empezar a tomar esta vitamina tan esencial para la salud de la madre y del feto. En general, se recomiendan 400 microgramos de ácido fólico diarios.
- Intenta relajarte: existe evidencia científica de que el estrés podría disminuir las probabilidades de quedar embarazada, razón por la que debes relajarte y disfrutar el proceso de concebir. Por ejemplo, podrías comenzar a hacer yoga o a leer un libro que tenías pendiente.
Preguntas frecuentes
Es probable que haya algunas preguntas que te estés haciendo estos días. Estas son las más comunes e intentamos darte una respuesta.
¿Cómo saber si hubo fecundación en la semana 2 del embarazo?
No podrás saber que la fecundación ocurrió en la semana 2 hasta que haya suficientes hormonas detectables en tu sistema y sean medidas por una prueba o testeo.
¿Qué tan pronto comienzan los síntomas del embarazo?
En algunos casos, los síntomas del embarazo comienzan a aparecer unos días después de la fecundación. Estos van desde signos físicos hasta una sensación extraña en el cuerpo.
Si bien es cierto que hay quienes experimentan cambios a los pocos días, muchas mujeres no notan ninguna diferencia. Incluso tras conocer los resultados de la prueba de embarazo se sorprenden porque “no sienten nada”.
Los signos más comunes son la micción frecuente, el dolor de senos, las areolas oscurecidas, la fatiga, las náuseas y la hinchazón. Por otro lado, entre los síntomas inusuales se encuentran los mareos, el sabor metálico en la boca y las hemorragias nasales.
La semana de la fecundación
Pese a que en la semana 2 del embarazo aún no estás embarazada, ¡este momento es crucial para la fecundación! Los síntomas presentados corresponden a los de una mujer en ovulación.
Las visitas y las pruebas médicas están orientadas a la fertilidad y a la posible detección de enfermedades congénitas que podrían ser transmitidas por los futuros padres.
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