El sueño en los niños a partir del año

Dormir en una habitación aparte puede ser difícil, pero con estrategias fáciles lograrás conseguir buenos hábitos de sueño en los niños a partir del año de edad para que esta transición no sea traumática.
El sueño en los niños a partir del año
María Alejandra Castro Arbeláez

Revisado y aprobado por la psicóloga María Alejandra Castro Arbeláez.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 10 febrero, 2020

Desde que nace, el niño no se despega de la madre y suele dormir en la misma habitación o incluso en la misma cama de los padres. Cuando llega el momento de que duerma solo y lograr el sueño en los niños a partir del año de edad puedes practicar algunas rutinas que lo ayudarán a relajarse.

El sueño infantil después del primer año

El recién nacido duerme prácticamente todo el tiempo, salvo cuando comen. El sueño en los niños a partir del año de edad se formará paulatinamente con patrones de 12 horas entre diurnas y nocturnas. Por lo general necesita la ayuda de la madre o padre para tranquilizarse y conciliar el sueño hasta que consiga regular el horario.

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¿Por qué mi niño no quiere dormir?

Varios motivos pueden desencadenar trastornos del sueño en los niños a partir del año. Una de las causas principales es la ansiedad de dejar la cama o habitación de sus padres. Esto lo incomoda y produce miedos y pesadillas.

Otras posibles causas:

  • Las molestias de la dentición también interfieren con el sueño normal
  • Que tenga frío o calor
  • Las habitaciones de colores fuertes y brillantes no inducen a la tranquilidad y al sueño

Patrones de sueño infantil

Por lo general, el niño necesita entre 10 y 13 horas de sueño. Aún así, hay niños duermen bien toda la noche y no duermen durante el día. Otros duermen un poco de día y vuelven a dormir por la noche. Mientras que hay bebés que no les conviene la siesta porque interfiere con su patrón de sueño nocturno.

A medida que crezca logrará dormir toda la noche a excepción de algunos períodos de vigilia y siestas.

El sueño infantil a partir del año tendrá un patrón similar al adulto: 75% sueño profundo y 25% sueño ligero.

Factores influyentes en el sueño del niño

El sueño regular en el bebé no será automático, puede tardar meses o años para que se adapte. En cualquier caso, es importante que lo eduques en buenos hábitos de sueño. Algunas causas probables de la intranquilidad al dormir son:

  • El temperamento y curiosidad del niño
  • La mala alimentación
  • Malos hábitos de sueño en los primeros meses de vida
  • Enfermedades

Rutinas para propiciar el sueño en los niños a partir del año

Muchos niños se resisten a dormir y ganan la batalla si los padres se rinden de inmediato. Ten en cuenta que es un periodo de transición negativa para tu bebé. Por eso, ten paciencia y toma nota de algunas estrategias eficaces y fáciles de implementar:

  • Dale un baño tibio
  • Establece la misma hora para acostarlo cada noche
  • Léele un cuento ameno o haced un juego tranquilo
  • Elimina los ruidos o luces fuertes en el cuarto
  • Que tenga a mano su manta o juguete favorito para que no se sienta solo

Debes determinar qué cantidad de tiempo necesita dormir tu hijo y cómo repartir esas horas entre el día y la noche.

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¿Qué no hacer a la hora de dormir?

Es importante eliminar cualquier elemento o actividad que cause distracción en el sueño de los niños a partir del año.

  • No coloques peluches grandes o varias almohadas que el niño pueda usar como trampolín para saltar de la cuna. Evita también que la cama esté cerca de cortinas cables o ventanas a su alcance.
  • No lo dejes hacer largas siestas.
  • Que el niño no participe, momentos antes de dormir, en juegos muy dinámicos que lo exalten.
  • Evita que coma demasiado a la hora de la cena, especialmente dulces.
  • No hagas prolongadas visitas a su cuarto para tranquilizarlo. El efecto será el contrario.

El sueño en los niños a partir del año puede regularse si ves sus necesidades desde su punto de vista. Es cuestión de que pruebes las conductas adecuadas que propicien buenos hábitos de sueño. Lo importante es que el niño duerma bien y lo suficiente para que no tenga comportamientos difíciles durante el día.


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