Dieta hidratante para niños en verano
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¿Sabías que las necesidades de líquidos aumentan ante el calor o la práctica de ejercicio físico? A pesar de que se recomienda beber de 1,5 a 2 litros a diario, también se encuentra en los alimentos, por lo que pueden cubrirse mientras comes. Por eso, te aconsejamos una dieta hidratante para niños en verano, ya que estos son más vulnerables a la deshidratación.
Además, el cuerpo está formado en un 60-75 % de agua, por lo que usarla como bebida principal es básico. Tampoco contiene calorías y aporta sales minerales. Incluso, se encarga de regular la temperatura corporal y facilita la digestión. También reduce el apetito y la ingesta calórica, clave en el control del sobrepeso y la obesidad.
¿Quieres saber cómo mantener a tus hijos bien hidratados mediante la alimentación? Sigue leyendo para descubrirlo.
Dieta hidratante para niños en verano
Contenido en agua de los alimentos
¿Sabes que las frutas, las verduras y las hortalizas contienen un 80-95 % de agua? Y, sin embargo, son los alimentos cuyo consumo es menor a la recomendación de 5 raciones diarias. Además, justo en verano es temporada de las que mayor contenido tienen, como la sandía, el melón, los espárragos y las verduras de hoja verde. Por eso, es el momento ideal para ofrecérselas a los más pequeños.
También encontramos los lácteos, sobretodo la leche, seguidos por la carne, el pescado y los huevos. Sin embargo, conviene tener en cuenta que el contenido disminuye o aumenta con la cocción según el tipo de alimento. Por ejemplo, las legumbres necesitan un remojo previo y, por tanto, pasan de un 7-10 % al 70-80 %. En cambio, es menor en el pescado al horno o a la plancha que en el crudo.
Bebidas hidratantes para niños
Como hemos comentado anteriormente, el agua es la bebida fundamental para los niños cuyo consumo depende de la sed. En ocasiones, se produce un rechazo, ya que carece de sabor, pero tiene solución. ¿Cómo? Se le pueden añadir unas gotas de algún cítrico, hierbas aromáticas e infusiones. Además, puedes añadirle rodajas de fruta y hortalizas frescas y dejarla reposar unas horas en la nevera. ¡Ya podéis disfrutar de un refresco casero!
Respecto a los refrescos, se recomienda reducir su consumo, ya que solo aporta azúcar o edulcorantes y, aunque resulte difícil de entender, deshidratan. Incluso, suelen acompañarse de otros productos como snacks salados y chucherías, por lo que se convierten en una bomba calórica.
Otras de las bebidas útiles son la leche y las bebidas vegetales, que suelen ser la segunda elección de los pequeños de la casa, según el estudio DONALD. Poseen la ventaja de que son ricas en calcio y vitamina D. En cuanto a las bebidas vegetales, que son el sustituto a la leche, es importante saber que hasta el año de edad están desaconsejadas (la de arroz siempre, ya que es fuente de arsénico).
Otra ventaja de la leche es que podéis crear numerosos batidos añadiendo fruta y triturándola. Incluso, podéis complementarlos con frutos secos y semillas, o darle sabor con canela y cacao en polvo. Son una fantástica opción, ya que les proporciona energía tras jugar en el parque.
Por último, existe un dilema con los zumos. ¿Qué es mejor, el natural o el envasado? Lo que está claro es que no equivalen a una fruta, ya que se les ha retirado la fibra haciendo que la absorción del azúcar sea más rápida. Por eso, las dietistas-nutricionistas recomiendan que se tomen de vez en cuando y se priorice la fruta fresca y entera, independientemente de que se prepares en casa o se compre. A pesar de que se vendan como sin azúcar añadido, tienen el mismo efecto que si lo llevasen.
Ejemplo de un dieta hidratante para niños en verano
- Desayuno. Un vaso de leche o bebida de avena con cacao en polvo sin azúcar añadido + un yogur natural con frutos rojos (arándanos frescos y fresas troceadas) y canela.
- Media mañana (si tiene hambre). Bocadillo crema de cacahuete y rodajas de plátano.
- Comida. Ensalada de quinoa, lentejas, tomate, aguacate y zanahoria + 3 albaricoques. Acompañado con un refresco casero de agua con melocotón, limón y tomillo.
- Merienda. 2 tostadas integrales con hummus.
- Cena. 1 bol de gazpacho con tropezones de hortalizas y picatostes + tortilla de queso + sandía con lima y menta.
Consejos para prevenir la deshidratación de los niños en verano
En resumen, los niños son más vulnerables a la deshidratación en verano por la altas temperaturas. Por eso, es importante que, desde pequeños, las frutas, las verduras y las hortalizas formen parte del día a día, igual que el agua como parte de una dieta hidratante para niños en verano.
Como prevención, se recomienda que vayan bebiendo a lo largo del día y procuren permanecer en un sitio bien fresco en las horas de más sol. Incluso, que vayan protegidos con una gorra en la cabeza.
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