¿Cómo saber si un juguete es peligroso?

Existen juguetes que pueden ser peligrosos para tus hijos, por eso debes prestar atención a estas recomendaciones.
¿Cómo saber si un juguete es peligroso?
María José Roldán

Revisado y aprobado por la psicopedagoga María José Roldán.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 11 febrero, 2020

Juguete, con ese nombre no debería ser peligroso y de hecho no lo es, lo que realmente lo convierte en un riesgo potencial es el uso inadecuado, la falta de supervisión y la elección incorrecta. Son las intoxicaciones por químicos, la estrangulación y la asfixia, los peligros a los que comúnmente se exponen los niños con el juguete inadecuado.

Por lo general los juguetes son inofensivos, en especial cuando observamos que se encuentran categorizados de acuerdo a la edad del niño. En consecuencia, no deberíamos equivocarnos en la elección correcta si conocemos la etapa en que se encuentra el pequeño. Del mismo modo, resulta muy importante escoger materiales de buena calidad.

Sin embargo, a veces el riesgo no está en el objetó en sí, sino en la manipulación de este o en el hecho de pasar por alto las advertencias de seguridad reflejadas en las instrucciones. Pese a sus características inofensivas, los juguetes a menudo causan accidentes e incluso en algunos casos han sido letales.

Prevención sin espanto: ¿Es peligroso el juguete?

El propósito de este post no es generar alarma, sobre todo cuando sabemos la importancia del juguete para el desarrollo del niño. Los pequeños pueden beneficiarse en gran medida del juego y sus herramientas, es por eso que a nivel mental, social y físico, pueden ser ayudados por medio de elementos de origen lúdico.

En tal sentido, no es recomendable la erradicación de los juguetes en la vida de los niños o evitar la adquisición de otros. Para comenzar a protegerlos es primordial atender a las recomendaciones de los expertos. A continuación vamos a darte algunas recomendaciones para que tú extremes las precauciones y tus hijos puedan continuar jugando sin peligro:

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  • En el caso de niños menores de tres años, no es conveniente que jueguen con piezas pequeñas que puedan tragar. Para obtener una medida sin riesgos, es recomendable que se compruebe que las piezas no sean inferiores al diámetro de un tubo de papel higiénico.
  • Para prevenir estrangulamiento, es aconsejable verificar que el juguete no contiene algún tipo de cuerda, trenza o cable de gran longitud.
  • Asegurarnos que los compartimientos para pilas se encuentre totalmente sellado e inaccesible para los niños. Se tiene entendido que uno de los objetos más peligrosos que puede tragar un niño son las pilas.
  • Evita que los pequeños jueguen con el envoltorio del producto, esto incluye cajas, bolsas y precintos de seguridad, puesto que aún cuando el juguete es recomendado para su edad, los elementos de embalaje no lo son.
  • Comprobar que el juguete no contenga sustancias tóxicas, tales como PVC, dibutilfatalato, xileno o tolueno; usados comúnmente en la preparación de cosméticos y pintura. En ocasiones, la utilización de estos productos por parte de los niños, puede provocar intoxicación o alergias.
  • Otro compuesto presente en algunos juegos y que es potencialmente nocivo para la salud de los infantes puede ser el plomo. El plomo puede hallarse en su composición como tal, pero especialmente es encontrado en la pintura del juguete.
  • Para los bebés menores de un año, los juguetes más indicados son aquellos elaborados en plástico, básicamente son de apretar y reproducir sonidos. En términos generales, no deberíamos excedernos con productos más complicados en esta etapa.
  • Algunas piezas que forman parte del juguete, pero que creemos que son inofensivas, pueden ser los ojos de un peluche o muñeco en general. Pese a que los ojos no están sueltos, no implica que no se puedan separar, lo cual constituye un riesgo si lo puede tragar el niño.

Otros consejos para prevenir accidentes con el juguete

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Jugar por su cuenta cuando ya están más grandes, trae como consecuencia que no sean concretamente juguetes lo que utilizan, sino cualquier cosas que esté a su alcance. En estos casos es recomendable que verifiquemos con qué está jugando, si hay hierba o sustancias tóxicas, está utilizando objetos cortantes o tiene riegos más grandes en el lugar donde juega.

La manera en que guardamos los juguetes o el lugar donde lo hacemos, también deben ser revisados cuidadosamente para prevenir accidentes. Por ejemplo, evitemos colocar el juguete en una caja o baúl tapado, pues tratando de localizarlo, el niño se puede quedarse atascado o se puede pillar los dedos.

No es conveniente que coloquemos los juguetes en bolsas de plástico para almacenarlos, pues corremos el riesgo de asfixia tal como si los dejáramos jugar con el envoltorio original. Debemos tener en cuenta que los niños van intentar conseguir su juguete en cualquier lugar donde lo coloquemos.

Es común que los niños jueguen a policías y ladrones, así que es recomendable que nos aseguremos de que las “armas” que usan en sus aventuras no sean filosas o puedan causar daño alguno. También se recomienda advertirles sobre el peligro de lanzarse objetos, correr por superficies riesgosas u ocultarse en lugares poco apropiados.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.