Claves para que las "regañinas" sirvan realmente para algo

Claves para que las "regañinas" sirvan realmente para algo
María Alejandra Castro Arbeláez

Revisado y aprobado por la psicóloga María Alejandra Castro Arbeláez.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 08 febrero, 2020

No sea solo regañar sino también educar. Aquí te damos algunas claves para que las “regañinas” sirvan realmente para algo beneficioso en la educación de tus hijos.

La disciplina es fundamental para que los hijos se conviertan en personas de bien. Algunos padres parecen creer que la disciplina implica un trato severo, que incluye amenazas, insultos y humillaciones. Sin embargo, la disciplina con la crueldad no educa ni corrige a los hijos. Al contrario, deja claro que los padres deben corregir con amor.  Por supuesto, en ocasiones tal vez haya que imponer algún castigo. Pero aun en esos casos, el hijo siempre debe entender la razón.

Lo más importante para corregir a un hijo es demostrarle que tú deseas lo mejor para él como hijo y por eso lo estás corrigiendo. Muchos padres no explican por qué le están llamando la atención a sus hijos y el hijo al no entender la situación se rebela, busca la orientación de otras personas a veces compañeros de la escuela, amigos o vecinos.

No hay una clave mágica para que las regañinas sean efectivas, pero como todo, la suma de muchas cosas logra el resultado deseado y más efectivo.  ¿Cuáles son algunas claves para que las “regañinas” sirvan realmente para algo?

son-388523_640

Conoce algunas claves

  • Padres unidos: los hijos observan la tensión entre los padres cuando se toma una decisión. Por ejemplo: puede ser que la madre regañe a su hijo por no terminar la tarea, tirar la ropa en el suelo, no limpiar su cuarto, etc. El padre en vez de apoyar la decisión de la madre da excusa y hasta insinúa que él tampoco lo hace. El regaño caerá sobre oídos sordos, por lo cual deben apoyarse en la disciplina.
  • Toma el control: demuestra quien es el jefe en casa y que tú tienes el control.
  • Sé claro y directo: no hay que maquillar las órdenes pues confundirá al niño. Ejemplo: “Mi cielo, ¿quieres recoger tu cuarto, por favor?”. El regaño debe ser claro y firme para que entienda qué es lo que tiene que hacer y qué no.
  • Sé firme: después de regañar porque su hijo ha hecho algo ma, este pondrá cara de niño bueno queriendo apeler a sus sentimientos y evitar el castigo. No permitas que se salga con la suya. Tú perderás el control y tus regañinas pierden efecto.
madre-hijo-regao-parenting
  • Disciplina: la disciplina es instrucción de una persona con el objetivo de que aprenda a obedecer o a controlarse por medio de reglas y de castigos. Por supuesto, jamás se debe ser irrazonable o maltratar al niño. Pero si no se le castiga conforme a lo que ha hecho, nunca mejorará.
  • Sé cariñoso: la familia no es ni una democracia ni una dictadura. La disciplina forma parte del proceso de educación. Si disciplinas a tu hijo con cariño, lo ayudarás a que sea obediente y a que se sienta seguro y querido.
  • No siempre regañar: los padres no quieren parecer un ogro y que la casa en vez de ser un hogar cálido sea una tormenta todo el tiempo, en vez de regañar deben tomar tiempo para relajarse un poco antes de hablar o corregir a sus hijos.

Las regañinas deben ser firmes, claras, demostrar quién tiene el control y que son beneficiosas tanto ahora como para el resto de su vida. Las regañinas continuarán en el colegio, en el trabajo y la familia siempre que esté determinada para un propósito el cual es mejorar en su rendimiento. Es gracias a los regaños que observamos que estamos haciendo algo incorrecto porque todos nos equivocamos y necesitamos corrección.

No te dediques solo a regañar sino también a educar, enseñar, corregir y disciplinar con amor para que los hijos crezcan en un hogar seguro, estable con reglas pero no pensando que es imposible hacer lo correcto, que no se sienta rechazado, sino que al contrario cada vez que se equivoca tendrá a alguien que desea corregirlo para que lo haga mejor y así las regañinas tendrán un efecto duradero y efectivo.

Muchos padres no tuvieron una educación con amor y por lo tanto, no saben como regañar con sentido, pero nunca es tarde para cambiar. Por lo tanto, analiza la situación, corrige y sigue adelante.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.