¿Cómo ayudan los probióticos a niños y embarazadas?

Estos alimentos contribuyen con la salud gastrointestinal pero también con el fortalecimiento del sistema inmunitario. 
¿Cómo ayudan los probióticos a niños y embarazadas?

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 23 abril, 2020

Los probióticos son alimentos principalmente lácteos que resultan muy beneficiosos para la salud humana. Se trata de un conjunto de microorganismos -bacterias- que contribuyen con el equilibrio de la flora intestinal y el fortalecimiento del sistema inmunitario. Por lo tanto, son recomendables incluso para niños y embarazadas.

Al consumirse dentro de una dieta balanceada, de forma regular, los probióticos refuerzan las defensas del organismo. Con lo cual, ayudan a mantener a raya muchas enfermedades.

¿Cuándo se aprecia el aporte de los probióticos?

En ocasiones, los problemas de alimentación, fármacos, el estrés, enfermedades y otros factores afectan la flora intestinal. Esto trae como consecuencia que las defensas bajen y se contraigan infecciones.

Por consiguiente, los probióticos son alimentos útiles en casos de ataque de baterías dañinas. La principal función de estos organismos es proteger el sistema de que colonicen en este, bacterias y agentes patógenos. Sin embargo, no todos estos ofrecen los mismos beneficios, algunos son más poderosos y efectivos en ciertos casos.

Sus aportes al organismo

Los estudios han demostrado que los beneficios de estos microorganismos se concentran  en los efectos inmunológicos y la salud intestinal. Por lo tanto, se recomienda su consumo en casos de diarrea y enfermedades como el síndrome del intestino irritable y otros trastornos intestinales.

Según investigaciones al respecto, son favorables en el tratamiento de la diarrea aguda cuando es infecciosa en los niños. También se reconoce su efecto antibiótico para prevenir problemas gastrointestinales. De allí que se observe su función inmunológica, pues protege a la mucosa intestinal del desarrollo y crecimiento de bacterias dañinas.

Por medio de los estudios sobre los probióticos, se ha determinado que su consumo mejora casos de intolerancia láctea. Se ha considerado su uso terapéutico en el cáncer de colon, debido a su incidencia sobre patologías en la microbiota.

En animales ha sido demostrado su efecto preventivo en el desarrollo de este tipo de cáncer. Otros beneficios del consumo de probióticos son:

  • Reducen los síntomas en caso de resfrío y fiebre.
  • Mejoran los síntomas de la mala digestión.
  • Ayudan a prevenir la aparición de la enterocolitis.
  • Ayudan a prevenir trastornos del tracto urogenital.
  • Favorecen la disminución de síntomas de alergias y asma.

Alimentos que contienen probióticos

Estos elementos pueden ser incorporados a nuestra dieta por medio del consumo de algunos alimentos. Para encontrarlos es preciso leer bien las etiquetas de los productos. Los componentes más comunes son el Lactobacillus, fructooligosacáridos y bifidobacterium. Por lo general, estos se encuentran en alimentos fermentados y lácteos, como yogures.

Al respecto, cabe señalar que muchos de estos productos son prebióticos, un elemento que favorece el crecimiento de los probióticos. Por esta razón, comúnmente se hallan asociados dentro los alimentos enriquecidos que se ofrecen en el mercado. Es decir, pueden aparecer naturalmente o ser añadidos para enriquecer el alimento.

Los probióticos pueden encontrarse en el pan de masa madre, el yogur, los quesos blandos (como el gouda), el kéfir, las microalgas, las chufas, la pasta de soja fermentada y el tempeh.

También pueden encontrarse en el chocolate negro, los pepinillos y otros vegetales encurtidos, el chucrut: una sopa hecha a base de col y verduras fermentadas, la sopa de miso (una receta de origen japonés que contiene arroz, cebada, frijoles y centeno fermentado) y en productos envasados enriquecidos.

Conclusión

En resumen, los probióticos son alimentos con bacterias que, al ingerirse, contribuyen con el equilibrio de la microbiota intestinal; es decir, el número de bacterias buenas que se encarga de mantener la salud del organismo.


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  • Olveira y González. Actualización de probióticos, prebióticos y simbióticos en nutrición clínica. Endocrinología y nutrición. 2016. 63. (9): 437-508. DOI: 10.1016/j.endonu.2016.07.006.
  • Guía Práctica de la Organización Mundial de Gastroenterología: Probióticos y prebióticos WGO Practice Guideline: Probiotics and prebiotics. 2011. [Online].

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