Alergia a medicamentos en niños: Síntomas y tratamientos

¿Es tu hijo alérgico o tienes sospecha de ello? No esperes más: en este artículo te contamos lo indispensable que debes saber sobre la alergia a los medicamentos en niños.
Alergia a medicamentos en niños: Síntomas y tratamientos

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 08 julio, 2019

¿Cuándo tu hijo presenta una reacción alérgica? ¿Cómo se puede controlar la alergia a medicamentos en niños? Es natural tener estas inquietudes cuando los infantes presentan eczema, urticaria o dificultad respiratoria después de ingerir medicamentos; te contamos cómo proceder.

Síntomas de las alergias por medicamentos

Los síntomas pueden ser distintos en dos personas alérgicas, aunque sea ocasionada por un mismo fármaco. Esto se debe al tipo de sensibilidad y la respuesta de cada persona.

Sin embargo, sí es importante reconocer a tiempo qué medicamento le produce la reacción. Estos son algunos síntomas de alergia según las zonas donde se producen:

Manifestaciones cutáneas

Se presentan unas horas después de ingerir el medicamento, o  incluso días después. Pueden aparecer urticarias, ronchas, eczemas o vesículas sin origen aparente. Además, suelen ser dolorosas y dar una sensación de quemazón.

Manifestaciones respiratorias

Por lo general, estas son leves; sin embargo, ocasionan inflamación en la tráquea y el tejido pulmonar. Como consecuencia, las vías respiratorias se cierran y esto impide respirar con normalidad. En este último caso, la situación debe tratarse con urgencia, pues tiene repercusiones graves.

Síntomas neurológicos

Similar a lo que ocurre en el tejido pulmonar, cuando hay mayor reacción, el tejido cerebral es afectado. Por lo tanto, los síntomas que produce son mareos y vértigos; en casos mas graves, puede llevar al coma y hasta la muerte.

Causas de la alergia a medicamentos en niños

Las reacciones de alergia a los medicamentos ocurren porque el sistema inmunitario identifica equivocadamente un medicamento como una sustancia perjudicial; es decir, los interpreta como si fueran virus o bacterias.

Cuando esto ocurre, este sistema produce un anticuerpo específico contra dicho medicamento. Se trata de sustancias químicas que causan los síntomas y signos de una reacción alérgica. Esto puede suceder la primera vez que el niño toma un medicamento o cuando ya lo ha hecho en varias ocasiones.

La tos seca en niños requiere de supervisión pediátrica.

¿Qué es la anafilaxia y sus signos?

La anafilaxia es una reacción alérgica a los medicamentos poco frecuente. Sin embargo, pone en riesgo la vida del paciente, pues desencadena una disfunción generalizada en los sistemas del cuerpo. Algunos de sus síntomas son:

  • Nauseas 
  • Vómito
  • Cólicos
  • Diarrea
  • Mareo
  • Caída de la presión arterial
  • Pérdida de conocimiento 
  • Convulsiones
  • Estrechamiento de la garganta y las vías respiratorias

“Los síntomas pueden ser distintos en dos personas alérgicas, aunque sea ocasionada por un mismo fármaco”

Medicamentos que producen alergias en niños

La alergia a medicamentos en niños puede ser producida por cualquier fármaco. No obstante, los más propensos a las alergias son los de uso frecuente, tales como los antinflamatorios y antifebriles, entre ellos el ibuprofeno, las aspirinas, el paracetamol, el nolotil y el voltaren. También pueden causar alergias los antibióticos de la familia de las penicilinas.

Tratamientos para las alergias

Existen muchos medicamentos que son eficaces y sencillos para utilizar; algunos son de venta libre y otros necesitan receta médica.  Es importante destacar que ambos grupos de medicamentos siempre deben ser recomendados por el pediatra de tu hijo; la automedicación no es recomendable bajo ningún punto de vista.

Antihistamínicos

Son los que se han utilizado para las alergias por más tiempo. Estos suprimen los efectos de la histamina, es decir, la inflamación, picazón y producción de moco en los tejidos.

Para las alergias leves, los pediatras recomiendan antihistamínicos en aerosol, jarabe o masticables, que se derriten. Por lo general, la prescripción es para tomarlos por la tarde o noche, ya que suelen causar sueño o mareos. Estos son de venta libre y fácil de adquirir.

Descongestionantes

Se administran para descongestionar la nariz, y algunas veces se recetan junto a los antihistamínicos. Sin embargo, los efectos secundarios de estos fármacos producen hiperactividad, ansiedad, palpitaciones o dificultad para dormir. Es por ello que su uso debe ser estrictamente medicado y por tiempo limitado.

Corticoesteroides o cortisonas

Provienen de la categoría de los medicamentos esteroides. Son poderosamente eficaces para el tratamiento de alergia a medicamentos en niños. Para ello, se requiere que se administre en un itinerario diario regularmente, en vez de una dosis cuando lo necesite.

Se consiguen en varias presentaciones, como cremas y ungüentos, y son eficaces para los eczemas en los niños. Por otro lado, algunos aerosoles contienen derivados de la cortisona y se usan en pacientes con alergia nasal.

Desensibilización del fármaco causal

Esta es una técnica que consiste en la administración progresiva del fármaco que causa la alergia. Solo se usa en algunas reacciones alérgicas graves y en casos en los que es realmente imprescindible, dado que no se encuentran otros medicamentos alternativos a la enfermedad.

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Prevención de alergias por medicamentos en niños

El pediatra desempeña un papel fundamental en la prevención de las alergias a medicamentos. Su primera responsabilidad es la de recoger datos clínicos, indispensables para realizar estudios alergológicos.

Es importante que se haga constar de forma detallada sobre la alergia del niño en la historia clínica. Por otra parte, para evitar una alergia por antibióticos, es recomendable limitar su uso innecesario. En el mismo sentido, se deben tratar de inmediato los cuadros clínicos propensos a infección.

En definitiva, la alergia a medicamentos en niños puede ser prevenida o, en su defecto, tratada de manera eficaz. Sigue estas sugerencias y tu hijo podrá gozar de buena salud sin sufrir daños irreversibles.


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