7 consejos para tratar la tos nocturna en los niños

La tos nocturna es un síntoma que causa incomodidad, dado que impide el descanso de cualquier persona. Sin embargo, en el caso de los niños puede resultar aún más molesta. Por lo tanto, se convierte en una angustia para los padres, quienes tratan de buscar una solución que les procure alivio y tranquilidad suficiente para conciliar el sueño.

Es común que aparezca de forma pasajera, cuando hay contacto con polvo, el humo o el frío; por ende, es normal que se presente como una reacción a ciertos factores ambientales.

Por lo general, la tos nocturna se produce como consecuencia de un resfriado, un catarro u otros problemas en las vías respiratorias. También puede aparecer por haber respirado algún tipo de agente irritante para los pulmones. Por otra parte, este síntoma puede ser indicativo de algún problema de reflujo gastroesofágico.

¿Qué causa la tos nocturna?

La tos es un mecanismo de defensa que se pone a funcionar cuando en el organismo se introducen agentes extraños, como las bacterias y los virus, por medio de las vías respiratorias. Las posibles causas más frecuentes son las siguientes:

• Asma. La inflamación en las vías respiratorias es claramente el sello del asma. Algunas veces la tos es una señal evidente y es importante si el niño sufre de este síntoma. Por lo cual, es conveniente tener siempre a la mano su debido tratamiento. Es tan frecuente que, según una publicación de la Asociación Española de Pediatría, esta condición afecta a 1 de cada 10 niños en España.
• Sinusitis. Es una infección viral o bacteriana, las personas que la sufren presentan irritación en la garganta. Esta es la razón por la cual tosen frecuentemente por las noches. Según un estudio de revisión, se trata de una causa frecuente de tos persistente en niños mayores de 6 años.
• Medicamentos. Algunos fármacos pueden causar efectos secundarios, de los cuales la tos nocturna puede ser uno de ellos. Es el caso de la budesonida, un esteroide inhalado para tratar crisis asmáticas, por ejemplo. Según un artículo de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, es un efecto adverso que puede ocurrir de forma “ocasional”.
• Infecciones virales. Estas afectan las vías respiratorias, como la gripe que es común en temporadas frías. También trae irritación o dolor de garganta y produce la tos. Según una publicación del Manual MSD, los agentes más implicados son los rinovirus, el virus de la gripe, el virus respiratorio sincitial, los enterovirus, los coronavirus y los adenovirus.
• Reacción alérgica. Al inhalar las partículas de polvo se irrita el tracto respiratorio. Esto puede conducir a la aparición de una tos repentina durante la noche. De hecho, una investigación reveló que hay una fuerte relación entre la tos seca nocturna y la atopia en los niños entre 3 y 14 años.

Consejos para tratar la tos nocturna

Estos son algunos consejos que pueden ayudar a evitar o controlar la tos nocturna en los niños.

1. El nebulizador. Este es utilizado con mucha frecuencia por la mayoría de los niños que sufren de asma. En las noches es costumbre que sufran de tos, quizás por el frío, la dificultad al respirar o la irritabilidad en los pulmones teniendo flema. En este se incorporan medicamentos, como el salbutamol en caso de crisis asmáticas. Algunos estudios comentan que es igualmente eficaz mediante nebulización que como inhalador.
2. Ambiente húmedo. Tener la habitación en ambiente húmedo es muy bueno. y para ello se puede usar un humidificador. Esto causa un efecto protector de la mucosa al contrario de las calefacciones y el aire seco.
3. Evita que alguna persona fume cerca del niño. El humo del tabaco contiene un elevado número de sustancias tóxicas que irritan la mucosa bronquial. Además, puede provocar enfermedades pulmonares graves como neumonía, según refiere un estudio sobre el tema.
4. Beber mucha agua. Ayuda a que las secreciones puedan fluir y así al niño se le facilitara expulsarlas.
5. Que el niño tome baños de vapor ayudará a incrementar la humedad en el aire y es posible que también alivie la irritabilidad de la garganta. Si esto se hace cada noche, hará que el niño no tenga molestias debido a la tos.
6. Dieta adecuada. Ofrecer una alimentación rica en verduras y cítricos. Una receta muy común puede ser el caldo de pollo, resulta muy eficaz ya que contiene verduras, y estas tienen las vitaminas que ayudan a reforzar las defensas del niño.
7. Darle una cucharada de miel. Este “remedio natural” está sustentado por la ciencia: un estudio de la Colaboración Cochrane reconoció su efectividad según los ensayos clínicos, aunque no parece superar al dextrometorfano, un fármaco usado frecuentemente para aliviar la tos.

¿Y cuándo se debe acudir al médico?

Hay que acudir al médico de inmediato cuando la tos nocturna se presenta en un bebé recién nacido. Igualmente, habrá que llevar a los bebés y niños a consulta si la tos cursa con dificultad para respirar, vómitos, fiebre u otros síntomas que impidan al niño hacer vida normal. También será necesario acudir a consulta si la tos se prolonga por mucho tiempo.