3 causas del aborto espontáneo
Conocer las causas del aborto espontáneo puede resultar de utilidad. Recordemos que el conocimiento, nunca está de más.
El aborto espontáneo (o natural) es aquel que se produce por causas ajenas a nuestra propia voluntad, con lo cual, la gestación se interrumpe abruptamente y el feto fallece. Desafortunadamente este tipo de aborto posee una de las tasas más elevadas de ocurrencia, con lo cual, es muy común en nuestra sociedad.
Si bien se trata de un tema incómodo (y por lo mismo, delicado) es necesario estar informadas al respecto. Bien sea para orientar o ayudar a otra persona o por nosotras mismas, si tal fuese el caso.
¿Qué es el aborto espontáneo?
Tal y como mencionamos anteriormente, se le conoce como ”aborto espontáneo” a aquel embarazo que finaliza de manera violenta antes de que se cumplan 20 semanas de gestación. En líneas generales, sus características son las siguientes:
El aborto espontáneo es repentino, abrupto, violento, generalmente sintomático y fatal (para el feto, en la mayoría de los casos).
Estadísticamente hablando, 8 de cada 10 abortos espontáneos se producen en las primeras semanas y antes de completar el tercer trimestre. Estudios afirman que al menos un 10 20% de los embarazos diagnosticados terminan por aborto espontáneo.
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3 causas del aborto espontáneo
El aborto espontáneo puede ocurrir por diversas causas. En general, la salud de la madre y el desarrollo del feto son los principales factores que condicionan la evolución de la gestación. Además, dependiendo del estilo de vida de la mujer, será más o menos propensa a tener un aborto espontáneo. Evidentemente, los hábitos afectan no solo nuestra salud, sino que, en gran parte, condicionan nuestras opciones.
No obstante, existen hábitos nocivos que podrían poner en riesgo nuestro embarazo, con lo cual podríamos perder a nuestro bebé. Por lo tanto, las causas del aborto espontáneo pueden ser, principalmente, estas 3 que te presentamos a continuación:
1. Herencia y genética
En general, las anomalías a nivel genético son la causa más frecuente de este tipo abortos. Investigaciones sugieren más del 50 % de los abortos espontáneos son resultado de alteraciones cromosómicas por excesos o defectos.
Los principales errores en el genoma se relacionan a la cantidad de cromosomas, lo cual es causa de impedimento para que el feto se desarrolle de manera normal. Evidentemente, al no haber un desarrollo sano, normal, el feto muere. Las anomalías cromosómicas más comunes son las traslocaciones, las triploidias y las trisomías.
En este caso, la herencia de los progenitores provoca que no se produzcan en el feto, aquellos genes requeridos para que este pueda desarrollarse posteriormente. Los problemas cromosómicos asociados con abortos espontáneos cursan con las siguientes situaciones:
- Gestación anembrionada: es aquel embarazo donde no se logra formar el embrión.
- Muerte fetal intrauterina: es resultado del cese abrupto en el desarrollo del embrión una vez que ha iniciado su formación.
- Embarazo molar: es un defecto genético en que el padre aporta ambos pares de cromosomas. En este caso, el ovocito fecundado no se desarrollará de forma normal y existirán anomalías en la placenta.
2. Trastornos de salud en la madre
Cuando se hallan problemas referentes a la salud de la madre, los inconvenientes podrían ser mayores; hablamos de cualquier tipo de anomalía, alteración o proceso patógeno que afecte a nuestro organismo antes y durante el embarazo. Los principales trastornos asociados son los siguientes:
- Infecciones, como la hepatitis, la toxoplasmosis o la rubeola.
- Miomas o tumores en el útero, especialmente aquellos de gran tamaño y en una ubicación riesgosa.
- Desarrollo de complicaciones relacionadas con la hipertensión, en especial casos de preeclampsia y eclampsia.
- Alteraciones hormonales asociados a trastornos en la tiroides.
- Malformaciones congénitas en el útero o el cuello uterino.
- Diabetes mellitus no controlada.
Por otro lado, el riesgo de aborto espontáneo es mayor en aquellas mujeres con antecedes previos de abortos. Algunos estudios proponen que la probabilidad de aborto en una mujer que nunca ha abortado es de 15 % y puede aumentar hasta un 50% después de 4 abortos.
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3. Estilo de vida
El proceso de embarazo también está condicionado por una serie de factores externos que pueden influir directamente en su desarrollo normal, por eso el cuidado de la mujer embarazada debe ser integral. Entre los factores relacionados con el estilo de vida de la madre, encontramos principalmente aquellos que atentan contra la salud de la gestante y el feto.
Aunque se crea que es suficiente con estar saludables a nivel médico, existen hábitos que si no los modificamos pueden ser contraproducentes para la salud de cualquier embarazo. Dentro de los hábitos que aumentan el riesgo de abortos espontáneos se encuentran los siguientes:
- Consumir cafeína en exceso.
- Ingesta crónica de alcohol.
- Uso de drogas ilícitas.
- Consumo continuo de cigarrillos y tabaco.
- Sobrepeso y obesidad.
De igual forma, los altos niveles de estrés y ansiedad también son un factor de riesgo potencial para el aborto. En este sentido, el estrés incrementa la liberación de hormonas como la corticotropina, la cual debe presentarse en el útero para favorecer las contracciones requeridas durante el parto.
No obstante, el estrés en sí no tiende a ser concebido como causa directa de aborto, pero sí la manera en que la madre maneje las situaciones de estrés. Por ejemplo, ante determinado escenario estresante, la madre asume un comportamiento negativo o incurre en hábitos poco saludables para un embarazo.
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