10 mitos que escucharás cuando estés embarazada
Cuando una mujer se queda embarazada lo primero que escuchará son mitos o ‘cuentos de abuelas’. Hay muchos diferentes y depende del lugar donde te encuentres si estás embarazada escucharás unos u otros. Desde Eres Mamá queremos contarte algunos mitos que muy probablemente escucharás cuando te quedes embarazada, pero ojo, algunos son verdaderos.
Mitos que escucharás cuando estés embarazada
1. No puedes comer sushi
Este mito es cierto. Necesitarás excluir todo el pescado crudo de tu dieta debido a los altos niveles de mercurio y la posibilidad de contaminación bacteriana. Incluso se recomienda que el sushi vegetariano sea tratado con cautela porque el chef puede haber utilizado los mismos cuchillos que fueron utilizados para los pescados crudos y el riesgo de contaminación puede ser alto.
2. Si dejo de fumar cuando me quede embarazada, el impacto para el bebé será peor que si sigo fumando
Este mito es falso. La nicotina se une a las células rojas de la sangre en lugar de hacerlo el oxígeno. La madre debe reducir drásticamente el número de cigarrillos que se fuma, y dejar de fumar (incluso el ser fumador pasivo puede ser perjudicial) es muy recomendable. Hay médicos que aconsejan que si la mujer pasa mucha ansiedad se fume 3 al día, pero más no.
3. Si tienes la barriga muy alta indica que será un niño
Es mito también es falso. La forma del abdomen y el aspecto de la barriga nada tiene que ver con el sexo del niño y sí tiene que ver con la firmeza y el tono de los músculos abdominales que tiene la madre en el momento del embarazo.
4. Puedo seguir haciendo los mismos ejercicios que hacía antes de quedarme embarazada
Falso. El ejercicio tendrá que ser muy moderado a partir de la semana 29 del embarazo y hacer un número menor de ejercicios aeróbicos y abdominales durante el tercer trimestre. Lo más recomendable son ejercicios de Yoga y Pilates, pero si tienes dudas, acude a tu médico para que te indique qué ejercicios son los más adecuados para ti.
5. Si experimento cualquier sangrado, debo correr al hospital inmediatamente
Mito que es totalmente cierto. Todo sangrado debe ser tratado como algo de riesgo y sospechoso, por eso debe ser investigado por profesionales de la salud para averiguar por qué ocurre.
6. Siempre puedo ponerme la epidural si el dolor es demasiado durante el parto natural
Esto no es cierto. Dependiendo la dilatación que tengas, el médico decidirá si es seguro ponerse o no la epidural. Es mejor decidirlo antes de ponerte de parto y que tu médico te indique cuáles pueden ser las contraindicaciones. Asimismo, si durante el parto estás muy dilatada y te ponen la epidural, es posible que los efectos se reduzcan y sí sientas dolor igualmente.
7. Si me tiño el pelo le haré daño al desarrollo del bebé
Falso. La coloración del pelo no daña al feto, pero sí existen investigaciones que exponen como la inhalación de gases químicos durante el procedimiento del tinte sí puede afectar, aunque no hay nada demostrado.
8. Si me estreso cuando estoy embarazada, es más probable que mi hijo tenga cólicos
Verdadero y falso. A pesar de la tensión que la madre experimenta para no dañar al feto directamente, bien es cierto que con altos niveles de ansiedad, de ira o de estrés, los vasos sanguíneos que constriñen a la placenta (se estrechan), y esto puede dar lugar a un suministro insuficiente de nutrientes y de oxígeno en la placenta. Esto se relaciona con la ansiedad y el estrés a largo plazo.
9. El dormir de espaldas durante el embarazo es malo para el bebé
Cierto. Si la madre duerme sobre su espalda, experimentará una caída en la presión arterial (síndrome hipotensivo supino). Esto puede hacer que exista una disminución de la frecuencia cardíaca fetal.
10. Beber un vaso de vino tinto al día
Falso. No se sabe qué cantidad de alcohol puede ser considerado seguro durante el embarazo. El consumo regular de alcohol conduce al síndrome de alcoholismo fetal (SAF) y por este motivo es muy importante no tomar nada de alcohol durante el proceso de gestación. Hay muchas bebidas sin alcohol disponibles y sabrosas que pueden hacerte disfrutar igualmente sin necesidad de poner en riesgo la salud de tu bebé.